La condición que Tamara Falcó e Íñigo Onieva le han puesto a los invitados que vayan a su boda

¿Quién le iba a decir a Tamara Falcó que finalmente se casaría con Íñigo Onieva? Después de tantas idas y venidas, la pareja del momento, empeza el 2023 con una reconciliación navideña y retomando su compromiso en el mismo punto que lo dejaron. Tras enterarse de la infidelidad de su novio el pasado mes de septiembre, la marquesa de Griñón ha hecho borron y cuenta nueva y ya está tachando los días del calendario.

Quizás la hija de Isabel Preysler pueda contar con los dedos de una mano a las personas que confiaron en su historia de amor con el empresario, pero lo cierto es que Onieva ha puesto todas sus ganas en reconquistar el corazón de Falcó y, contra todo pronóstico, lo ha conseguido. Así que, ahora sí, ¡suenan campanas de boda!

El día marcado para pasar por el altar en un principio era el 17 de junio de 2023, sin embargo, algunos contratiempos le llevaron a retrasar el día tal y como ella mismo confirmío: "Sí, hemos aplazado la boda", decía afirmando que sería finalmente el 8 de julio y desvelando los detalles del aplazamiento. Una celebración que tendrá lugar en El Rincón, el bien más preciado de la familia y que podría ser una de las últimas veces que acogiese un evento de tal categoría.

Se conocen pocos detalles al respecto, pero de lo que no tenemos dudas es que Tamara Falcó tiene "un estrés tremendo". Una de las incógnitas que más interés causa es el vestido de la novia, algo que de momento solo hemos conocido que la encargada del diseño de su traje será Sophie et Voilà.

La condición indispensable para poder ir

La lista de invitados también está dando de qué hablar y en este caso ha sido el novio quien ha querido poner una regla indispensable que afecta, sobre todo, a su círculo más cercano. Íñigo Onieva ha tomado la decisión de que solo podrán ir a la boda aquellos que estén casados o comprometidos, es decir, no podrán ir acompañados de novias.

Una norma que no ha sorprendido a nadie, pues es normal que estén limitando su lista de invitados, intentando de que no se les escape información ínitima y guardar su secretismo en todo momento. Así lo ha explicado Leticia Requejo en El programa de Ana Rosa, añadiendo que "su madre le está intentando colar invitados", pero que ellos calculan en torno a "unos 300".