Última hora
El último cumpleaños de Jimi Hendrix: de fiesta en el backstage del Madison Square Garden con los Rolling Stones y Janis Joplin
En el vestuario, Jimi Hendrix charló con sus amigos, los Stones, e hizo una 'jam session' con Mick Taylor, el nuevo guitarrista de la banda
Quizá no tuvo tarta, ni sopló velas. Puede que no le cantaran el ‘Happy birthday to you’, ni recibiera paquetes envueltos en papeles de colores. No hizo falta. Porque el día que Jimi Hendrix cumplió 27 años, se hizo a sí mismo el mejor regalo. Sin saber que sería su último cumpleaños. Ese día, 27 de Noviembre de 1969, tocaban los Rolling Stones en Nueva York. Y el genio de la guitarra, decidió celebrar su aniversario acudiendo al Madison Square Garden. Antes de sentarse en su butaca para ver a sus amigos tocando en directo ‘(I Can't Get No) Satisfaction’, se pasó por el backstage. Y después de la actuación… siguió la fiesta.
Te recomendamos
El tour que hicieron los Rolling Stones por Estados Unidos en 1969 (con Ike & Tina Turner, B.B. King y Terry Reid como teloneros) ha sido calificado por la crítica musical como "la primera gira mítica de rock and roll de la historia". También se ha dicho que fue “el mayor evento de rock del año” o que "forma parte de la leyenda del rock and roll". Era la primera gira con Mick Taylor, quien reemplazaba a Brian Jones (fallecido en Julio del '69) y tan solo había tocado en un concierto antes de emprender el periplo norteamericano. Fueron esas actuaciones ‘sold-out’, las que cimentaron el estatus de estrellas del rock de la banda.
Su penúltima parada fue en Nueva York, en el Madison Square Garden, los días 27 y 28 de Noviembre. Gran parte de lo que allí sonó, formaría parte del segundo álbum en directo del grupo británico, llamado ‘Get Yer Ya-Ya's Out!’, su primer disco en directo que llegaba al nº1 en UK. Y ocurrirían otros hechos inesperados, como ver a Janis Joplin saliendo al escenario para hacer con los Turners una interpretación improvisada de ‘Land of 1000 dances’.
Pero lo más destacado de esa noche tuvo como protagonista a Jimi Hendrix. El 27 de Noviembre de 1969, el guitarrista de Seattle cumplía 27 años. Y decidió regalarse la mejor fiesta de cumpleaños. Además de acudir al concierto de sus amigos, llegó al legendario recinto con la suficiente antelación como para pasar un buen rato con sus colegas en el backstage. Charlando, bebiendo, fumando… o improvisando notas con su guitarra, su compañera inseparable.
El legendario productor Eddie Kramer (cuyos créditos figuran en discos de los Rolling Stones, Hendrix, los Beatles o David Bowie) contaba en 2021, en una entrevista para el podcast The French Connection, cómo fue aquel emblemático momento. "Recibí una llamada de teléfono. Para mí era muy extraño recibir una llamada de Jimi. 'Hey tío, ¿Quieres venir esta noche a ver a los Rolling Stone en el Madison Square Garden?'. Yo respondí, 'Sí, Jimi, eso sería fantástico, muchas gracias'. Y él concluyó, 'Nos vemos en el backstage'"
"Así es como pasó todo. Agarré mi bolsa con la cámara y me reuní con él. Los Stones y Jimi eran amigos, y fue maravilloso. En el vestuario, hablando con todos los colegas. Guardo esa bella foto de Mick y Jimi sentados en el banco, con la pared de bloques de hormigón y las perchas detrás. Estos dos iconos, magníficas personalidades del rock, sentados juntos... simplemente charlando". En el vestuario, Jimi también conversó y bromeó con Keith Richards e hizo una especie de 'jam session' con Mick Taylor, que él después rememoraría en Rocks Off: “Vino al concierto, creo que entonces él estaba viviendo en Nueva York… durante el periodo con su banda The Gypsies. Entró en el backstage e improvisamos un poco con nuestras guitarras en el vestuario. Muy rara vez vi a Jimi Hendrix sin una guitarra. Siempre estaba tocando la guitarra”.
Cuando el concierto terminó, Hendrix y los Rolling Stones, entre otros, continuaron la celebración en una fiesta privada. El elemento triste de todo este episodio es que Jimi Hendrix falleció pocos meses después, el 18 de Septiembre de 1970. Y su 27º cumpleaños, sería el último.
Jagger conoció a Hendrix años atrás y alababa su talento en una entrevista para Rolling Stone: “Me encantó Jimi Hendrix desde el principio. Desde el momento en que le vi. Pensé que era fantástico. Me convenció al instante. Mr. Jimi Hendrix es lo mejor que he visto jamás. Era emocionante, sexy, interesante. No tenía una buena voz, pero lo compensaba con su guitarra. La primera vez que le vi fue en el Club Revolution de Londres. Yo era una de las seis personas que había en el local y Jimi estaba tocando. No me lo podía creer. Era una locura. Increíble. Fui muy amigo suyo. Realmente era un buen tipo. Quizá, un poco despistado”.
El cantante de los Stones fue la inspiración de la canción (póstuma) de Hendrix, ‘Dolly Dagger’, tras un incidente ocurrido, casualmente, durante su última fiesta de cumpleaños. Mick, de forma accidental, se cortó en un dedo. Cuando preguntó por una tirita, Devon Wilson (la novia de Jimi) corrió hacia él y le dijo que no era necesario. Delante de Jimi, chupó la sangre de su dedo. De ahí esta frase: "Ella bebe la sangre de un borde irregular. Bebe, nena”.
Alicia Sánchez
Periodista en busca de historias chulas del pop