Cualquiera puede tener la agenda apretada, aunque poca gente puede decir que en sus últimos meses ha tenido que ocuparse de rodar una película con Tim Burton y de co-protagonizar un videoclip de Sabrina Carpenter. Le pasa a Jenna Ortega, que cada vez tiene más asumido su papel de estrella después del éxito mundial de Miércoles, que le ha llevado a hacer proyectos de lo más peculiares.

En la secuela de la película de 1988 es Astrid, la hija de Lydia Deetz —Winona Ryder—, una estudiante bastante alejada del mundo de los espíritus; mientras que en Taste rinde homenaje a la cinta de 1992 representando la pelea a muerte de los personajes de Meryl Streep y Goldie Hawn. Ambas tienen un tinte oscuro mezclado con la comedia, pero, ¿cómo fue realmente grabar ambas cosas? ¿Que fue más complicado?

En LOS40 no podíamos dejar pasar la oportunidad de preguntarle al respecto, así que ella misma nos contestó durante su gira de promoción de la película en Londres sobre esto, sin dudar en lanzarle algún que otro piropo a los profesionales de ambos proyectos:

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"Oh, probablemente Tim Burton, quizá porque se siente más como trabajo, no, ¡en realidad no! No se siente trabajo con Tim", empezó contestando Ortega. "Sabes lo que es con Tim, aunque él es súper normal y agradable, y divertidísimo, solo quieres hacer un buen trabajo. Es un honor formar parte de este mundo, quieres hacerlo lo mejor que puedas, quieres hacer lo que necesitas para contribuir al guion y saber tu lugar, saber cuando has hecho algo horrible y saber cuándo arreglarlo. Solo por el respeto abrumador que le tengo", continuó.

Con Bitelchús Bitelchús es la segunda vez que actriz y cineasta comparten proyecto tras Miércoles, y aunque ya debe estar acostumbrada, es evidente que siente una gran admiración por su trabajo; lo que hace que cuide cada detalle de sus escenas al milímetro.

"Solo tratábamos de hacer el tonto juntas"

Sin embargo, si atendemos a que respondía qué era más complicado, deja claro que lo de Sabrina fue algo entre amigas. "Sabrina fue simplemente una cosa divertida, emocionante, tonta y simple que hice en un día libre con una buena amiga mía, ¿sabes? No estábamos en un trabajo, solo tratábamos de hacer el tonto juntas, con una buena amiga mía", concluye.

El videoclip, aparentemente, se rodó en apenas un día libre de Jenna —no lo confirma, aunque no parece tener demasiados en su rutina—, y el resultado ya ha sido disfrutado por todos los fans de la cantante y los suyos propios. Lo describe como algo "tonto", aunque siempre dejando claro que disfrutó grabándolo, algo fácilmente reconocible si se atiende a sus escenas: aunque trate de no salirse del personaje, su complicidad con Carpenter traspasa la pantalla.

Por ahora, todo el mundo puede ver el videoclip de Taste; aunque también puede disfrutar de la interpretación de Jenna en Bitelchús Bitelchús, que ha vuelto a la gran pantalla 36 años después de que la primera fuera todo un éxito de taquilla internacional.

Bitelchús Bitelchús ya está en cines.