The Police: Sting cogió el periódico de Copeland y acabó con una costilla rota antes de uno de los mejores conciertos de su vida
El batería reconoce que aun cuando su diario "ya era ilegible y estaba destrozado, yo tenía que recuperarlo"
The Police en 1983: Sting, Stewart Copeland y Andy Summers / PA Images
Como perros y gatos. Es sabido que The Police no congeniaban. A veces, sus discusiones eran tan acaloradas que llegaban a las manos. Habitualmente, las fricciones personales se producían cuando hacían música. Sin embargo, en una ocasión, de forma insólita, Sting y Stewart Copeland forcejearon… por un periódico. El batería terminó hincando su rodilla sobre el pecho del vocalista, que se revolcó dolorido por el suelo. Pocas horas después, conquistaron América con un histórico concierto, uno de los mejores de sus vidas, en el Shea Stadium de Nueva York. Durante la actuación, el también bajista cantó con una costilla rota… aunque todavía no lo sabía.
Empezaron conviviendo en un apartamento de dos plantas en el exclusivo barrio londinense de Mayfair. En Enero de 1977. Y terminaron como el rosario de la aurora. En 1984. Después de cinco discos magníficos y una gira espectacular: ‘The Synchronicity Tour’ (1983–1984). Posteriormente, se reunieron esporádicamente para conciertos benéficos y en 2007 hicieron un tour mundial que fue el que más recaudó ese año.
El quinto – y último - álbum de estudio de The Police, ‘Synchronicity’ (1983), arrasó en todo el mundo. En pleno apogeo de su fama, la banda londinense lo presentó en directo con un largo tour de 105 conciertos por tres continentes. Ya entonces, las discusiones entre Sting y Copeland eran tan acaloradas que podían terminar en peleas a puñetazo limpio. No obstante, la aversión entre los miembros de la banda no perjudicaba a sus actuaciones.
El 18 de Agosto de 1983, su show en el Shea Stadium de Nueva York frente a 70000 personas fue uno de los más importantes de sus vidas. En declaraciones a Classic Rock, Copeland confesó: “me sentí como si conquistara América”. Y, de acuerdo a Sting, esa actuación en el inmenso estadio situado en Queens constituyó la cúspide de su carrera.
https://www.youtube.com/watch?v=o5FPPoLqkCk&list=PLLdSTSC512JYVSAt-TPHqidxEZ8uBiczS&index=1
"Me di cuenta de que no se podía llegar a nada mejor. Esto era coronar el Everest. Tomé la decisión en el escenario. ‘Ok. Aquí es donde esto termina. Justo ahora’”, publica Paperboyarchive.com. Y casi al final del concierto, ironizó anunciando: “Me gustaría dar las gracias a los Beatles por prestarnos su estadio”.
Pocas horas antes de ese concierto de The Police en la cúspide, tuvo lugar un incidente que había dejado en Sting una dolorosa huella.
https://x.com/ThePoliceBand/status/1957487997135523886
Stewart Copeland, en una entrevista de Rick Beato para su canal de Youtube, recordaba: “Hicimos nuestras pruebas de sonido y nos divertimos. Sting agarró mi ‘New York Times’ y yo le dije, ‘¡mierda, dame mi periódico!’. Así que terminamos en un tira y afloja”. Pero las cosas llegaron más lejos: “Yo finalmente tuve que poner una rodilla sobre su pecho para recuperar mi jodido periódico”.
https://www.youtube.com/watch?v=Y1Sr-VFAR8Q
Aunque “ambos nos reímos histéricamente”, lo cierto es que Sting terminó revolcándose por el suelo, dolorido, gritando: “¡Maldita sea Copeland, siempre te pasas de la raya!”. Stewart recuperó su periódico y esa noche hicieron uno de sus shows más brillantes y trascendentales de su carrera.
La historia no acabó ahí. Al día siguiente, Sting seguía sintiendo molestias en el pecho y fue a que le hicieran una radiografía. Descubrieron entonces que Copeland, en su afán por recuperar su periódico, le había roto la costilla a Sting.
https://x.com/ThePoliceBand/status/1951684979584381030
En su libro 'Police Diaries', Stewart añadía algún detalle más: "Tristemente, le rompí una costilla después de la prueba de sonido en el Shea Stadium… empezamos a pelearnos por mi periódico, que en ese momento ya era ilegible, estaba destrozado, pero yo tenía que recuperarlo... "
"Así que, esa noche, hicimos uno de los mejores conciertos de nuestras vidas con su costilla rota", reconoce el batería. “Lo petamos".