Richard Madden (Robb de ‘Juego de Tronos’) está contento de no haber llegado al final

Poco a poco vamos asimilando que Juego de Tronos ha acabado. La serie más comentada de la década puso punto y final el pasado 20 de mayo. Su final dividió al público entre los que lo aceptaron sin quedarse y los que pidieron a HBO que volvieran a rodar la octava temporada entera. De hecho, hasta crearon una petición formal en Change.org (¡hasta dónde hemos llegado!).

Ahora, cuatro días después, seguimos hablando sobre Juego de Tronos. Incluso aquellos actores que dejaron la serie hace unas cuantas temporadas, han querido aportar su opinión sobre el final. ¡Y es que nos encanta cuando pasan estas cosas!

Richard Madden, quien dio vida al Robb Stark en Juego de Tronos, ha sido el último en hablar sobre la serie. El actor, que goza de una nueva popularidad gracias a la serie Guardaespaldas, ha asegurado en una entrevista para Variety que su salida de la producción de HBO supuso un alivio.

¿La razón? La cantidad de años que han pasado sus ex compañeros de reparto en la serie: “Llegó a convertirse en una rutina muy dura porque desde el episodio piloto hasta mi muerte pasaron cinco años reales. Creo que estar atado a un mismo personaje cinco años puede ser demasiado en algunos momentos, aunque lo dejes apartado durante seis meses antes de retomarlo. Me lo pase de maravilla, fue una experiencia que impulsó mi carrera y que me hizo aprender muchísimo”.

Pero estas preciosas palabras no significan que, cuando los guionistas decidieron matar a su personaje (con una de las muertes más sorprendentes que se recuerda de la serie), no sintiese cierto alivio: “Agradezco que terminara cuando lo hizo, porque esos actores se ha pasado once años interpretando a sus personajes y es algo como… se merecen una medalla porque es un maratón”.

Sin lugar a dudas, a Richard no le ha ido nada mal tras dejar la serie. El actor británico, además de el Guardaespaldas, ha aparecido en la película de La Cenicienta y en la reciente Rocketman.