¿Y si la inteligencia artificial es el verdadero ‘quinto Beatle’?
El uso de la tecnología para extraer la voz de John Lennon de una vieja maqueta de los Beatles reaviva el rebate sobre los derechos de autor
Desde que aparecieron por primera vez en The Ed Sullivan Show en 1964, los Beatles se perfilaron como la gran banda de segunda mitad de siglo. Un año después, con la publicación de Rubber Soul, Paul, George, Ringo y John demostraron que se convertirían en unas estrellas del pop que, además de mover masas y destilar entusiasmo, eran, ante todo, innovadores musicales.
En el estudio, experimentaron con técnicas de ingeniería de sonido que rápidamente se convirtieron en elementos estándar en la grabación que permanecen hoy en día. Perfeccionaron la técnica de reproducir las cintas al revés, grabaron la voz de John Lennon a través de un altavoz giratorio y llegaron a utilizar paños de cocina sobre la percusión para amortiguar los golpes, entre otras cosas. Mención aparte merece su célebre Sgt. Pepper's Lonely Hearts Club Band, uno de los discos conceptuales más importantes de la historia, o la integración de instrumentos de origen indio en sus canciones y videoclips.
Si tenemos en cuenta todos estos detalles, no debería sorprendernos que Paul McCartney esté usando inteligencia artificial para producir el que dice que será “el último disco de los Beatles”. Aunque no se conocen muchos detalles, parece estar empleando esta técnica para limpiar una cinta con una canción escrita e interpretada por John Lennon a finales de la década de 1970. "Pudimos tomar la voz de John y obtenerla pura a través de esta inteligencia artificial", explicó el músico, "para poder mezclar el disco, como lo haríamos normalmente".
Hay muchas preguntas al respecto, y el otro de los miembros vivos de los Beatles ha querido responder algunas de ellas. Ringo Starr ha aclarado a Rolling Stone que “jamás” falsificarían la voz del difunto John Lennon para la nueva canción, aunque sí usan inteligencia artificial para limpiar fragmentos grabados previamente. A este medio también ha afirmado que la canción contará con la voz del difunto George Harrison.
Las distopías que comenzamos a ver hace unos años en Black Mirror ya han llegado, y como si viviéramos en un capítulo de la serie de Charlie Brooker, algunos experimentos recientes han conseguido sintetizar las voces de Rihanna, Drake, Eminem y otros para que canten canciones que ellos mismos nunca grabaron. Esto crea una incertidumbre comprensible entre los artistas cuyas voces se generan artificialmente y los escritores, cantantes y editores de música cuyos derechos de autor quedan en entredicho.
¿Es legal utilizar una demo voluntariamente entregada por Yoko Ono, la viuda de Lennon, y agregar la voz del difunto artista? Esta tecnología es descrita por el propio McCartney como algo “un poco aterrador, pero emocionante, porque es el futuro”, y, sin duda, es controvertido. En realidad, no hay mucho de novedoso en el uso de la tecnología para ‘limpiar’ una grabación, de forma que se elimine el ruido ambiental, para poder trabajar y regrabar sobre ella.
De hecho, Paul, George y Ringo hicieron exactamente eso cuando grabaron The Beatles Anthology, donde incluyeron dos canciones nuevas basadas en demos que John había grabado antes de su asesinato en 1980. Y como señaló McCartney en una entrevista reciente, el director de cine Peter Jackson hizo algo similar en la producción de Get Back, la serie documental sobre la grabación de Let it Be que puede verse en Disney+.
Inteligencia artificial y problemas legales
Cada vez son más los casos de música generada por inteligencia artificial que está llegando a las plataformas de streaming y redes sociales, y probablemente, esto no ha hecho más que empezar. Estas herramientas han facilitado a los usuarios cotidianos la clonación de la voz de un cantante y replicar su voz en una pista nueva o existente.
En las últimas semanas, hemos asistido a una proliferación de versiones impensables. Por ejemplo, Rihanna cantando 'Cuff It' de Beyoncé, se ha vuelto viral en Twitter y TikTok.
Los expertos de la industria creen que estamos a punto de entrar en una nueva era de la música. A medida que los generadores de música basados en inteligencia artificial se vuelven más poderosos, es más difícil decidir quién posee los derechos de autor de sus obras. Pero las preocupaciones legales no terminan aquí. El entrenamiento de aplicaciones de inteligencia artificial requiere el uso de música con derechos de autor. ¿Es eso una infracción de los derechos de un artista?
Algunas de estas preguntas se están discutiendo actualmente en las demandas por derechos de autor y es probable que veamos más acciones legales, ya que los artistas creen que sus derechos sobre las creaciones intelectuales están amenazados. A medida que la inteligencia artificial continúa evolucionando, el mundo del arte en particular puede enfrentar problemas de derechos de autor adicionales. Ajustar la orientación legal ahora puede funcionar como preparación para ese futuro de Black Mirror que ya está aquí.
Daniel Garrán
Jefe de producto de LOS40 Classic