Crítica de ‘alpha’: la Aitana más electrónica llora el pasado y celebra el presente en un disco identitario
Es el futuro que algunos pronosticamos para ella cuando la vimos aparecer en ‘Operación triunfo’
Motiva hacer una reseña de una artista que te gusta especialmente, pero también tiene su complejidad. ¿Seré lo bastante objetivo? ¿Podré disfrutarlo teniendo en cuenta que sigo obsesionado con canciones como En el coche o Los Ángeles? Estas son algunas preguntas que me he hecho antes de darle al play y desbloquear el nuevo disco de Aitana. Prácticamente había escuchado la mitad de las canciones que componen el tracklist. Hay que tener en cuenta que, además de la transición que sucedió a 11 razones, la era alpha se levantó en base a tres singles previos (Los Ángeles, LAS BABYS y miamor). Resulta, sin embargo, de lo más estimulante tener por delante siete temas inéditos y escuchar el álbum en su conjunto y orden para comprobar si todo tiene una razón de ser. ¿Ha conseguido la artista – siempre según mi humilde opinión – lo que pretendía? Este es mi veredicto del esperado tercer trabajo discográfico de la que, para mí, es integrante titular de la Santísima Trinidad del Pop de este bendito país.
alpha es, de alguna manera, el futuro que algunos – yo me incluyo – pronosticamos para Aitana cuando la vimos aparecer en Operación triunfo. A pesar de la inexperiencia, a pesar de no controlar el medio, era fácil imaginarse a la cantante convertida en una popstar. El propio Manu Guix, en un día cualquiera en la Academia, dijo que en el mundo de la música había un hueco importante para ella como diva del pop. Aunque se ha mostrado agradecida, Aitana siempre ha preferido no hacer mucho caso de esos títulos aspiracionales que le atribuían los fans en redes y los medios de comunicación. Es un hecho, sin embargo, que con su tercer disco no solo ha asumido esa condición, sino que ha querido celebrarla al máximo. alpha es el resultado de una toma de control absoluta de su carrera y el álbum que, allá por 2018, se esperaba que algún día llevase a cabo.
alpha no deja de ser una sucesión de cartas de amor, desamor y cierta melancolía para los dos grandes protagonistas del disco: Sebastián Yatra y Miguel Bernardeau
Pero vuelvo a lo más importante y lo que interesa: el ADN del disco. Sí, alpha funciona. Que no cunda el pánico. Funciona y se disfruta. Además es un disco que invita a la escucha en repeat una y otra vez para ir descubriendo y redescubriendo las canciones del repertorio (admito que ahora mismo tengo en bucle Dararí, Ella bailaba y Luna, aunque también le ha dado bastante bola a AQYNE con Danna Paola y 2 Extraños). Curiosamente, alpha tiene mucho que ver con 11 razones. Me gustó que ya entonces Aitana centrará el tiro por el pop/rock dosmilero para su segundo LP. Con alpha hace lo mismo, pero exprimiendo al cien por cien el pop electrónico de finales de los noventa y la primera mitad de los dosmil. Quizás no busque homenajear a esa grandiosa época del pop, pero lo hace, trae de vuelta el espíritu y la ambición de unas estrellas internationally que, hoy en día, están de retirada o en otros quehaceres. Pero sigo.
El hilo conductor de alpha es clarísimo y, desde la intro, Alpha 09, hasta la canción número quince, Pensando en ti (ojo, con un guiño a Teléfono maravilloso), existe coherencia en los dos aspectos clave que engloban el proyecto: la identidad sonora y el tema de fondo que se aborda en las letras de las canciones. Hay chicha – hay carnaza – y hay calidad, pero también hay intención de reivindicarse como artista adulta. Aitana quiere que la gente sepa que ella maneja los hilos, que ella decide, que alpha es suyo, es su vida. Es el disco del cambio que ella ha decidido dar al mundo por necesidad o por pura ambición (en el mejor de los sentidos).
El hilo conductor de alpha es clarísimo y existe coherencia en los dos aspectos clave que engloban el proyecto: la identidad sonora y el tema de fondo
Porque – y aquí reside la principal diferencia con su anterior trabajo y ese álbum que hizo a posteriori y terminó en un cajón – Aitana se ha marcado lo que ahora se conoce como ‘hacer un Shakira’. No utiliza nombres propios, pero, amiga mía, son muchos años siguiéndote la pista y con una novela inspirada en tu persona (spam: el título es La noche que perdí a La Chica del Pop). Sin pudor ni pena – y menos mal – la artista ha volcado sus sentimientos a cholón sin importar el qué dirán. Y es que, queridos y queridas, alpha no deja de ser una sucesión de cartas de amor, desamor y cierta melancolía para los dos grandes protagonistas del disco: Sebastián Yatra y Miguel Bernardeau. Son varias las referencias y los mensajes que se esconden detrás de cada tema. “Tantos años que costó estar juntos, cada uno en su lado del mundo. Solo en sueños te besaba porque nunca lo aceptaba…”, le canta a Yatra en Luna, una de las baladas de alpha (la Aitana baladista está más viva que nunca). O el recordatorio para Miguel en Dararí: “Esa casa nos vio enamorarnos. Donde al final solo discutimos. Y por más que digas que cambiemos, tú y yo nunca nos entendimos”.
El único pero que tiene alpha – y aquí voy a ser completamente sincero – es que el recuerdo de Formentera sigue siendo muy fuerte y los singles posteriores estuvieron tan bien elegidos que no hay una canción que, a priori, tenga potencial para convertirse en un hit instantáneo. Aun así, Dararí y Ella bailaba son pistas que, trabajadas en radio, plataformas y redes e, incluso, dándole un featuring curioso, podrían tener recorrido tras la publicación del álbum. Si algo merece alpha es el desarrollo a medio y largo plazo. Más allá de la gira, más allá de las acciones promocionales que se desarrollen estas próximas semanas, el concepto de este disco es tan poderoso que merece una continuidad en el tiempo. Lo merece el disco y lo merece Aitana. No me gustaría que en enero dé carpetazo y si te he visto no me acuerdo. Quiero un beta, un gamma y un delta. Quiero una Reputation Era al ritmo de pop electrónico.
Aitana ha conseguido armar un álbum con el que reivindica su personalidad propia como artista, diferenciándose claramente de la corriente urbana que es tendencia en plataformas. Ha creado una comunidad a través de un cambio que merece reconocimiento y la atención de un público global. El trabajo está hecho, ahora solo falta que el tiempo haga lo suyo. De momento, y mientras llega el día, mi más sincera enhorabuena, Aitana.
Mi Top 3 (sin contar los singles oficiales):
- Dararí
- Ella bailaba
- Luna
Puedes escuchar el disco aquí:
Adriano Moreno
Periodista de LOS40 y escritor. Me gustaría vivir en la película ‘Chicas malas’ y Russell Tovey lleva...