Las 5 claves para gestionar mejor tu tiempo

A menudo tenemos la sensación de que el tiempo no nos alcanza para hacer todas las cosas que tenemos previstas en nuestras tareas diarias: trabajo, estudiar, ese curso al que te apuntaste, algo de deporte, ocio, descansar, ver a los amigos y a la familia, las tareas domésticas…. Una sensación que, paradójicamente, desde que el teletrabajo ha llegado a nuestras vidas es más frecuente debido al fuerte cambio en las rutinas.

¿Por qué es importante gestionar el tiempo?

La forma en la que te organices y aproveches tu día repercutirá directamente en cuánto aproveches tu día. Es cierto que, para todo el mundo el día tiene 24 horas, aunque parece que a unos les da tiempo a hacer muchas más cosas que a otros. ¿Por qué ocurre esto? La respuesta es muy sencilla: la clave se encuentra en la forma en la que organices tu tiempo.

Gestionar tu tiempo de una forma adecuada te ayudará a alcanzar las metas que te hayas propuesto, ya sean laborales, en cuanto a estudios o en cómo aprovechar tus horas restantes para hacer cosas como aprender un idioma, hacer deporte, leer o cocinar. Una buena forma de organizar las 24 horas de tu día es hacer en tres bloques de ocho horas, destinando uno para descansar, otro para la jornada laboral y un tercero para lo demás. Además, dentro de los dos bloques que no son para dormir, puedes reorganizarlos para asegurarte que no desaprovechas ni un minuto.

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Por si esto fuera poco, uno de los principales beneficios que tiene una buena gestión del tiempo es la satisfacción que produce en uno mismo al final del día. Sensación que ayuda a que nos sintamos bien con nosotros mismos y reforzando nuestro autoestima frente a otras sensaciones como la frustración, que es justamente la que se produce cuando sientes que has desperdiciado el día.

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Cómo gestionar el tiempo para ser más productivo

Hay personas que por naturaleza son muy organizadas y metódicas, mientras que otras tienden a distraerse con facilidad pero, seas como seas, hay ciertos trucos con los que conseguirás una mejor gestión de tu propio tiempo.

1. Establece objetivos claros

Piensa qué quieres hacer realmente y qué quieres conseguir y póntelo como meta. Puedes organizarlo día a día o de manera semanal, por ejemplo: el lunes tienes que terminar una presentación, dedicar una hora a estudiar inglés y otra hora a hacer deporte; mientras que, el martes, debes prepararte una reunión importante, adelantar algo de trabajo de cara a tus próximas vacaciones, hacer la compra y comprar un regalo.

2. Piensa cuáles son tus prioridades

Piensa cuáles son las tareas imprescindibles en tu día y ponlas en la posición más alta de la lista de cosas por hacer. De esta forma, si inevitablemente tienes que dejar algo para otro momento, no será nunca la tarea que tenías que hacer sí o sí.

3. Crea una rutina

Establecer horarios es una de las claves de una buena organización. Sobre todo, de cara a ser conscientes sobre cuánto tiempo real inviertes en cada tarea, por eso, crear un horario y una rutina previa hará que te cunda más el tiempo. Además, nuestro cuerpo tiende a mecanizar aquellas tareas que ya hemos convertido en rutina, por lo que todo será mucho más fácil.

4. Deja un margen de tiempo entre las tareas

No somos máquinas de trabajar, aunque nuestro objetivo sea ser lo más productivos posibles. De hecho, está demostrado que un descanso entre una tarea y la siguiente es más beneficioso que seguir trabajando sin levantar la vista del ordenador. Estira el cuerpo, relaja la vista y continuarás mejor.

5. Ordena tu lugar de trabajo

El orden es un factor que, aunque parezca mentira, ayuda mucho a una buena concentración y, por lo tanto, a que aproveches mejor el tiempo. Mantener ordenado tu lugar de trabajo te ayudará psicológicamente a comenzar una tarea agradable y no a sumergirte en un caos. Además, perderás menos tiempo buscando cosas traspapeladas.