Kiko Matamoros se enfrenta a la verdad en el espejo de 'Supervivientes' y así reacciona
El colaborador de Sálvame se muestra asustado ante su imagen
Kiko Matamoros, que fue expulsado del concurso Supervivientes el pasado domingo, fue caminando tranquilamente hacia el espejo. En bañador y sin camiseta se sometió a una dura prueba, en este caso psicológica, porque volver a verse después de casi tres meses sin hacerlo por la participación en el reality de supervivencia, impacta a cualquiera.
Así ha sucedido con el resto de los participantes, que al ver su reflejo en el espejo, han alucinado bastante por el cambio físico sufrido.
Kiko Matamoros entendió al observar su reflejo por qué se sentía tan cansado y sin fuerzas durante su estancia en la isla de Honduras. Su reacción fue impactante, soltó un: “¡Dios, Dios, Dios, si parezco Gandhi”.
Comenzó a analizar su rostro y comentó que no le había quedado mal pero el resto del cuerpo, a juzgar por lo que se decía, no le gustó nada: “Me he consumido totalmente”. Al descubrir en qué habían quedado sus tatuados brazos se dio cuenta de que se le habían descolgado: “Estoy asustado”.
Matamoros se vio muy delgado pero también muy perspicaz cuando adivinó el peso que ha perdido. Él apostó por 20 kilos y el programa le confirmó que eran 19,9 kilogramos ante lo que sonrió a la cámara y dijo: “La verdad, es que listo soy”.
Planes con Marta López Álamo
En el plató le esperaban Marta López Álamo y algunos planes para este verano. La modelo, que le ha defendido en los estudios de Mediaset, le tiene preparado un romántico viaje a la capital del amor: París, y otro a la isla del mediterráneo, Menorca. El resto de las vacaciones las irán decidiendo en función de lo que más le apetezca hacer a Kiko, que para eso ha vivido la arriesgada experiencia de concursar en el espacio de Telecinco.
En el encuentro con su pareja en Honduras, que fue criticada por el público por pasar más días que ninguna otra visita, Marta y él hablaron de boda y de formar una familia. La influencer dejó claro que en la isla no se casaba. Ahora que están juntos puede que ese deseo se plasme y en breve los veamos luciendo anillos de compromiso.
En cuanto Matamoros retome su rutina, seguro que se entrega a una buena alimentación y a una rutina de ejercicios que consigan que sus músculos que se han ido descolgando por falta de actividad vuelvan a su lugar. Para ello, su chica que es muy constante con la alimentación y el deporte le podrá ayudar. Matamoros es muy presumido y querrá verse pronto bien.
En alguna ocasión ha tirado de cirugía estética para verse mejor. Entre las operaciones a las que se ha sometido figuran la de nariz, bolsas,lifting para alisar las arrugas y eliminar bolsas de los ojos.
Su pareja también ha pasado por alguna que otra cirugía. De hecho, cuando se vieron en la isla hondureña, ella le indicó que se había reducido el tamaño de las prótesis del pecho porque estaba incómoda y ahora había elegido unas de formas más naturales. “Mi cuerpo no admite tanto tamaño y tampoco me gustaba en bikini o lencería", aseguró la modelo en su red social Instagram. A Kiko pareció gustarle el cambio.