'Wrecking Ball' de Miley Cyrus cumple 7 años, ¿por qué es tan importante esta canción en su carrera?
La imagen de la cantante subida en una bola de demolición mientras lloraba al desamor se convirtió inmediatamente en historia del pop
¿Acaso hay quien no recuerda la imagen de una jovencísima Miley Cyrus cantando una desgarradora balada al desamor a bordo de una enorme bola de demolición? Probablemente no. Y es que no cabe duda de que Wrecking Ball ha sido una de las canciones que más repercusión ha tenido dentro de la carrera de la ex chica Disney, colándose directamente y con un lugar privilegiado en la historia del pop desde el momento de su estreno.
Un lanzamiento para el cual hay que echar la vista atrás varios años, exactamente hasta agosto de 2013. Una canción que en su séptimo aniversario de vida sigue siendo tan recordada, repetida y casi tan polémica como el primer día.
De hecho, ha sido la propia Miley Cyrus quien se ha dejado llevar por la nostalgia rememorando lo que ha significado este tema en su trayectoria: "Siete años de Wrecking Ball. Mi concepto del tiempo está completamente estropeado. Lo siento como si hubiera pasado toda una vida... pero igualmente como si hubiera sido ayer. Gracias por todo el apoyo que me disteis entonces y, por supuesto, por todo el amor que continuáis demostrando por mi arte hoy. Siempre agradecida e inspirada." Unas palabras que ha acompañado con imágenes del conocidísimo vídeo en el que, aunque sus lágrimas se consagrasen como unas de las más famosas de la música, fue su desnudo lo que realmente dejó sin palabras a medio mundo.
De hecho, fue tal el impacto del videoclip que se convirtió en el más visto del año 2013, arrebatándole el número uno a One Direction, con Best Song Ever. A día de hoy Wrecking Ball supera las 1.000 millones de visualizaciones en YouTube, además de ser uno de los clips más parodiados e imitados de la historia.
Una canción que, al igual que el disco Bangerz en sí mismo, marcó un antes y un después en la carrera de Miley Cyrus, con canciones como Adore You o We Can’t Stop. Así fue como la artista y su look con el pelo corto se despedían por completo de la imagen de niña inocente que le acompañaba hasta el momento, en parte, gracias al fenómeno adolescente de Hannah Montana. Con una imagen madura, rebelde y explotando al máximo su cara más sexy, el desnudo de Miley Cyrus en Wrecking Ball se ganó la censura en muchos países como Francia. Un cambio de actitud que también quedó en evidencia en su famoso twerk junto a Robin Thicke en los MTV Music Awards, también en 2013. El año en el que conocimos a una nueva Miley.
Sin embargo, no todo han sido excesos en la vida de Miley Cyrus. Por muchos vaivenes que ha tenido en su vida, en la época de Malibú la artista se reconcilió con su "yo" más calmado. Fue justo en esa época cuando confesó avergonzarse y, en cierto modo, arrepentirse del videoclip de Wrecking Ball: "Eso es algo que no se puede borrar. Balancearme desnuda sobre una bola de demolición va a vivir conmigo siempre", comentó Miley Cyrus.
Por si esto fuera poco, también confesó haber grabado el vídeo bajo los efectos de las drogas. Un clip que se grabó cuando entonces tenía 20 años. Sin embargo y por suerte, ahora la ex chica Disney ha afirmado haber dejado atrás las adicciones en su vida.
A día de hoy, no cabe duda de que Miley Cyrus atesora una carrera más que reseñable a sus espaldas en el que, como toda gran estrella del rock, algún escándalo que otro no ha pasado desapercibido. Durante años hemos conocido su faceta más alocada, pero en los últimos meses también hemos visto a la Miley más reivindicativa, más adulta y más comprometida que nunca. Por si esto fuera poco, en lo musical acaba de presentar Midnight Sky, una canción con la que también ha apuntado hacia lo más alto (al igual que en tiempos pasados) y que, apenas una semana después de su estreno ha sido nominada a Canción del Verano en los VMAs 2020. ¡Casi nada!
¡Felicidades, Miley!